El café en la linde del bosque es un pequeño cómic destinado a un público infantil publicado por Astronave (Los omniscientes, Royalty Witches), la línea editorial de Norma dedicada al pública infantil y juvenil. Mikey Please hace de autor completo en esta bonita historia.
La edición de esta historia infantil está formada por 48 páginas en formato cartoné
Antes de pasar a hablar más en profundidad, y debido al público al que está destinado, se entrara ligeramente en detalle sobre los acontecimientos de la historia.
La trama tras El café en la linde del bosque
Rene es la protagonista de esta simpática historia. Su sueño siempre ha sido abrir una cafetería donde preparar sus deliciosas recetas y poder compartirlas con el resto del mundo. Y por fin lo ha cumplido. Tras montar en la linde de un bosque su deseada cafetería, y contratar a Glumfoort como camarero, está ansiosa porque los vecinos del lugar prueben sus delicatesen. Pero el único cliente que da una oportunidad a la pequeña cafetería detesta el sabor de la deliciosa de Rene.
Glumfoort descubre que los potenciales clientes del Café desean otro tipo de alimentos menos «apetecibles». Ellos prefieren gusanos, barro y demás alimentos poco aptos para humanos.
Glumfoort y Rene tendrán que llegar a un acuerdo para sacar a flote la cafetería en la linde del bosque.
Los dibujos de Mikey Please
Lo más interesante de esta obra son las ilustraciones. La narración se encuentra fuera de bocadillos que entorpezcan el dibujo, dejándole todo el protagonismo.
El artista utiliza un estilo limpio y lleno de detalles y color para hacer de esta historia un lugar acogedor donde el lector puede reconfortarse.
Please se encarga de ilustrar toda la página, con un estilo muy desenfadado que le encaja muy bien a los «monstruos» que viven en el bosque cercano a la cafetería.
Conclusión
Lo que más llama la atención de El café en la linde del bosque es la ilustración y el color. Mikey Please lleva un gran trabajo a las espaldas (podéis echar un ojo a su web) y sabe muy bien como impactar. Esto se nota tanto el el estilo de dibujo como en el color.
La historia en si que plantea el autor es muy interesante. El objetivo de esta historia es el sueño de Rene de ofrecer alta cocina en su propio restaurante. Finalmente, opta por un café para empezar y poder ofrecer sus increíbles recetas.
El problema es que los «clientes» de la zona buscan otro tipo de «degustación». Glumfoort le ofrece la posibilidad de servir otro tipos de platos y ahí se produce un enfrentamiento entre dos puntos de vista. Esta curiosa historia se supone que trata sobre la colaboración y el saber llegar a un acuerdo entre estos dos puntos de vista. Por desgracia siento que el autor, quizás por no alargar la historia demasiado, no ha sabido plasmarlo correctamente.
Aún con esto, os animo a echarle un ojo y dejaros enamorar por las increíbles ilustraciones y colores de esta historia.