

David Nicholls, autor bestseller internacional, publica con Letras de Plata la novela Aquí y Ahora. Una obra que nos traslada a los escarpados paisajes del norte de Inglaterra, traducida por Daniel Casado.
Marnie hace mucho que no tiene vida social. Teletrabaja como editora freelance y su mayor hobby es leer, dos cosas que no le empujan a salir mucho de casa. Además se divorció hace seis años y desde entonces su vida y la de sus amigos han tomado caminos distintos.
Michael es un profesor de geología enamorado de su trabajo. También se ha separado hace poco pero no consigue levantar cabeza. Sumido en una pequeña depresión, realiza largas caminatas por la campiña inglesa. Todo con tal de no estar en una casa llena de recuerdos.
Con la ayuda de una amiga en común, Cleo, Michael organiza una excursión para recorrer Inglaterra de costa a costa. En un grupo conformado por Cleo, Michael y alguna persona más también se encuentra Marnie, cansada de decir que no a todos los planes que le proponen.
Pero como suele pasar con este tipo de planes, mucha gente empieza a descolgarse en los primeros días. Al final, solo quedan Michael y Marnie. Enfrentados a un clima impredecible y colinas más empinadas de lo deseado con tal de no estar en una casa llena de recuerdos
He disfrutado tantísimo leyendo esta historia que no sé ni por donde empezar. ¡Qué maravilla de narración! No sé por qué nunca había leído a David Nicholls ya que tiene varios éxitos de ventas en su bibliografía. Entre ellos Siempre el mismo día (2009), novela que fue adaptada a guion por él mismo para la gran pantalla en 2011.
Aquí y Ahora es una novela divertidísima. Os juro que he llorado de la risa en algunos pasajes. Sin embargo, también es tierna y conmovedora.
Sin dudar ni un ápice, nada en absoluto, creo que lo mejor de la novela son sus protagonistas. Marnie, a pesar de la fobia social que ha desarrollado en los últimos años, es una mujer muy divertida y con muchísimo ingenio. Michael es melancólico y esconde un trauma que le impide avanzar, no obstante sabe encontrar la comedia en las pequeñas cosas.
Juntos consiguen las mejores interacciones y conversaciones que he leído en mucho tiempo. Tienen charlas chispeantes y perspicaces, con un humor de lo más británico, con las que poco a poco van desprendiéndose de su soledad. Ha habido momentos en los que me he sentido allí con ellos, caminando, charlando y muerta de la risa.
La historia está llena de descripciones de pueblos, pintorescos hotelitos rurales en los que paran a pasar la noche, y típicos pubs ingleses en los que beben más de lo recomendable. Al menos, para poder seguir su plan de ruta a pie. Pero, sobre todo, nos traslada a los páramos y a las pendientes embarradas por la lluvia.
Y menos mal que está allí Michael para contarnos en todo momento donde nos encontramos y los nombres de las montañas que nos rodean. Algo que a Marnie le llega a desesperar.
Aquí y Ahora aborda la soledad. Lo cómoda que es en ocasiones para los protagonistas, pero también hace que se conformen con menos de lo que merecen y crean que la felicidad está fuera de su alcance.
Una historia contada con un lenguaje sublime, una magnifica experiencia que odié que terminara. Marnie y Michael son dos personajes que se van a quedar conmigo para siempre.
Con una prosa suave y bellamente escrita. Con protagonistas reales con los que es fácil identificarse y empatizar. Aquí y Ahora se va directa a mi top cinco de mejores lecturas del año.
«- Gris claro, gris oscuro, negro, gris y marrón. Podríamos tener el Golden Gate delante, el golfo de Nápoles o yo que coñó sé, y ni nos enteraríamos.
-¿Quieres que empecemos a bajar? A ver como estás cuando lleguemos al hotel.
-Pero si ya sé cómo estaré. Estaré… enfadada joder. ¿No te rías de mí! – exclamó, aunque notaba que ella también estaba a punto de echarse a reír-. Solo bájame de aquí.»
Fragmento de Aquí y ahora (2025).