Dragon Quest 1 & 2 HD-2D: Uno de los mejores remakes de todos los tiempos

Un recopilatorio imprescindible para todos los fans de los JRPG clásicos.

Han pasado casi cuatro décadas desde que Dragon Quest se convirtió en uno de los pilares más importantes del JRPG tradicional, pero volver a sus primeros capítulos siempre ha sido complicado por todo lo que ha avanzado el género desde entonces. Sin embargo, los remakes de Dragon Quest 1 & 2 HD-2D que han llegado a Switch, Switch 2, PlayStation 5, Xbox Series y PC han demostrado que no solo se puede volver a jugarlos, sino que se puede hacerlo mejor que nunca.

Lo que tenemos en estas nueva versiones es mucho más que un lavado de cara: estamos ante dos nuevas versiones que reescriben la experiencia desde la base, respetan y amplían cada diálogo y, aportan mejoras, nuevos arcos de historia, cambios en personajes, escenas nuevas, contenidos que antes no existían y un montón de ajustes de calidad de vida que convierten estas entregas en la mejor puerta de entrada posible a la saga.

Para muchos jugadores, esto será reencontrarse con el origen de todo. Para otros, será descubrir por primera vez el nacimiento del JRPG moderno… pero sin arrastrar sus limitaciones de los años 80. Vamos a verlo en profundidad.

Volver a los orígenes nunca había sido tan cómodo

Lo primero que sorprende al iniciar Dragon Quest I HD-2D es cómo Square Enix ha conseguido darle un alma completamente nueva a estos dos juegos. La historia sigue siendo la misma: eres el descendiente de un héroe legendario, el reino está en peligro y tienes que enfrentarte al Señor de los Dragones. Pero esta vez, hay un trasfondo e historia que hace que todo tenga una profundidad y una naturalidad que no tenía en su momento. El remake añade nuevas conversaciones, animaciones exclusivas que refuerzan las emociones de los NPC y una serie de escenas ampliadas que ayudan a que el viaje tenga mucho más peso narrativo.

Lo mismo ocurre con Dragon Quest II, cuya historia ya era más compleja al incluir un trío de protagonistas. Esta nueva versión profundiza más en la relación entre los tres descendientes del héroe de DQI, explica mejor por qué se unen, añade nuevos diálogos entre ellos y, sobre todo, les da personalidad. Antes eran casi avatares mudos y ahora reaccionan, opinan y se complementan muchísimo mejor.

El resultado final es que ambos juegos, sin dejar de ser versiones más sencillas de las entregas que han ido llegando a las tiendas con el paso de los años, han mejorado mucho respecto a su lanzamiento original. Siguen siendo aventuras directas, reconocibles y lineales, pero llenas del encanto de Yuji Horii. Además, al tener ya disponible Dragon Quest III, la historia conecta muchísimo mejor y se disfruta más de la trilogía y de los cambios que se han ido añadiendo al jugarlas en el nuevo orden en el que Square Enix los ha lanzado.

La mejor versión del HD-2D

Desde el lanzamiento de Octopath Traveler hace ya unos cuantos años, hemos visto como Square Enix ha ido perfeccionando el estilo HD-2D, de sus títulos con cada entrega. En nuestra opinión, alcanzaron la cima con Triangle Strategy, un título sobresaliente en todos sus aspectos, pero lo cierto es que lo que han logrado con Dragon Quest I & II es impresionante.

Los sprites son más detallados y expresivos, la iluminación de los escenarios está muy bien pensada, especialmente en interiores, donde las sombras y los efectos de luz dotan a las localizaciones de una profundidad muy superior a la de otros títulos HD-2D anteriores. Además, los escenarios combinan elementos 2D con modelados 3D que aportan volumen sin romper la estética retro y, como no estamos ante un remake que busque realismo, sino uno que intenta recrear cómo recordamos que era el juego original, esta combinación de elementos funciona muy bien desde el primer momento.

La animación de hechizos, habilidades y monstruos también se han rehecho por completo, lo que se nota especialmente en Dragon Quest I, donde el estilo visual del juego original era muy justo incluso para la época.

Nosotros hemos tenido la oportunidad de completar ambos títulos en Switch 2 y esta versión mueve el juego a 4K en modo sobremesa y 1080p en portátil, sin tirones de ningún tipo. Todo fluye con una suavidad absoluta, incluso en las zonas más grandes de DQII.

Novedades y mejoras de calidad de vida

Si hay algo que diferencia este remake de otros de la saga es lo mucho que se ha trabajado para adaptarlo al jugador moderno sin romper su esencia original. Por ejemplo, se ha añadido un minimapa al movernos por el mundo, han añadido los diálogos contextuales al pulsar un botón que se incorporaron en entregas más recientes como Dragon Quest VI o VII, para saber qué opinan los personajes sobre la situación actual en la que estamos.

También se ha añadido un sistema de guardado que podemos usar en cualquier momento y la interfaz y los menús se han rehecho casi por completo para hacer que sea mucho más sencillo organizar el inventario, acceder a las stats de los personajes o ver los objetos que tenemos equipados.

Y esto sin contar modificaciones más sutiles, como los cambios en las rutas de las mazmorras, los indicadores visuales para interactuar con cofres difíciles de ver o la mejora en la mejora en el diseño de los pueblos y ciudades, que ahora se exploran de una forma mucho más clara. Como veis, el diseño clásico sigue ahí, pero ha sido pulido con mucho cariño.

El mismo cuento, mejor contado

Una de las cosas que más se nota al jugar estos remakes es que la historia ya no está de adorno. No hay grandes giros argumentales, pero sí un trabajo constante de afinado que hace que todo encaje mejor.

En Dragon Quest I HD-2D, el viaje del héroe sigue siendo sencillo – seguimos viajando en solitario como el descendiente del héroe de Dragon Quest III -, pero ahora la narrativa está llena de pequeños momentos que dan contexto, como los aldeanos que reaccionan a nuestro progreso y diálogos nuevos al regresar a ciertos lugares.

Sin embargo, donde más brillan estos cambios es en Dragon Quest II. El trío protagonista, que antes funcionaba casi como tres roles jugables, ahora sí transmiten la sensación de ser un grupo. Los personajes comentan lo que ocurre, muestran dudas, se alegran, tienen nuevas líneas de diálogo entre ellos y se han añadido escenas completamente nuevas que refuerzan su relación y el vínculo que los une como descendientes del héroe del primer juego.

También se ha trabajado mucho la conexión entre ambas aventuras. El legado del héroe de Dragon Quest I no es solo un detalle de la intro, sino algo que se menciona y se recuerda varias veces en la secuela. Además, se ha añadido un personaje completamente nuevo del que no daremos detalles, pero que nos ha gustado muchísimo.

Dragon Quest I sigue siendo un juego relativamente corto que podemos completar en unas 8 o 12 horas según el ritmo de cada jugador. Dragon Quest II es mucho más grande, rondando las 20–30 horas y con mazmorras más elaboradas y un mundo más amplio. En conjunto, el paquete I & II ofrece más de 30–40 horas de contenido si exploramos con calma, y puede alargarse mucho más si queremos completarlo al 100 %.

¿Cómo ha cambiado el combate en Dragon Quest 1 & 2 HD-2D?

Si hay algo que la saga nunca ha intentado cambiar por completo es su sistema de combate. Y aquí la base sigue intacta, pero se han retocado detalles como la IA de aliados y enemigos, las animaciones de todos los ataques y la cámara se mueve levemente en algunos combates especiales pero, por lo demás, estamos ante un sistema de combate por turnos tradicional.

Siguen siendo dos títulos difíciles, con combates algo duros en los que será muy importante saber medir cuál es la mejor habilidad que tenemos que usar en cada momento. También será importante pararse a subir de nivel en un par de ocasiones pero, aun así, se nota que Square Enix ha suavizado mucho los picos de dificultad para evitar momentos de frustración para los jugadores más jóvenes.

Conclusiones del análisis de Dragon Quest I & II HD-2D – Nintendo Switch 2

Square Enix no solo ha traído de vuelta dos de los capítulos más importantes de la historia del JRPG: los ha convertido en su versión definitiva. Dragon Quest I & II HD-2D refina, mejora, cuida y amplia ambos títulos y los convierte en dos de los mejores remakes que hemos jugado en toda nuestra vida como jugadores.

Si eres fan de Dragon Quest, estos remakes son un homenaje maravilloso. Si nunca los has jugado, no hay mejor forma de descubrirlos.