Silent Hill f, un soplo de aire fresco a la franquicia. Análisis

Nos encontramos ante un análisis complicado: Silent Hill es una de nuestras sagas favoritas y este juego tiene mucho de la franquicia, aunque es lo suficientemente diferente como para que pudiera haberse llamado de cualquier otra forma. ¿Nos ha gustado? Te lo contamos a continuación.

Sabíamos que Silent Hill f es una suerte de reinvención de la saga y como tal lo tomamos cuando comenzamos a jugarlo. Si nos pides una apreciación más concreta, podemos decir que hace lo mismo que hizo en su momento Silent Hill 4: The room: coger la forma jugable de Silent Hill y contar su propia historia en un enclave distinto del de la saga madre. Hasta aquí todo bien, aunque algunas decisiones tomadas nos han parecido demasiado arriesgadas. Vayamos por partes.

Una historia perfecta.

Silent Hill f nos propone un nuevo escenario alejado del Maine de los Estados Unidos clásico en la saga. Aquí el primer riesgo tomado. Controlamos a Hinako Shimizu, una joven que vive en el pueblo ficticio de Ebisugaoka, en el Japón de los años 60. Torturada por los maltratos de su padre, la sumisión de su madre y la perfección de su hermana, se verá envuelta en un misterio que tendrá que resolver cuando su ciudad natal se ve asediada por monstruos salidos de las peores pesadillas, mientras busca a sus amigos perdidos en una densa niebla y una extraña plaga vegetal que asola el pueblo. La historia tiene mucho de Silent Hill y se agradece el esfuerzo por conectarla con la saga. Encontraremos aquí mucho surrealismo, pesadillas sin retorno y la posibilidad de completar el final hasta cinco veces con diferente resultado y con detalles nuevos en cada vuelta, por lo que es quizás, el juego de la saga que más invita a ser rejugado. No hablaremos más de la historia porque lo realmente atractivo del juego es ir desgranándola poco a poco.

Gráficos a la altura

Técnicamente, Konami nos ofrece un juego bastante competente, con todo lo que se le puede pedir hoy en día a una aventura de acción y terror como esta. Quizás la ambientación ha jugado en su contra esta vez, pues los escenarios son bastante poco distintos entre sí, a pesar del esfuerzo de los desarrolladores de que sean variados y múltiples. Hemos visto detalles que no nos han gustado, como ropa tendida más dura que un muro de piedra y elementos repetidos a lo largo del pueblo. Detalles sin importancia, aunque son cosas que hacen que los juegos brillen entre tanta competencia. Por otro lado, la mencionada plaga vegetal que cubre el pueblo sustituye aquí al mundo oscuro lleno de óxido de la saga principal, algo que le sienta bien en vista de la ambientación de este Silent Hill f.

En lo que respecta a los modelados de personajes y monstruos, son estupendos, muy realistas y rallan la perfección en las excelentes escenas pre-grabadas, que te hacen sentir dentro de la historia por completo. Mención especial para los monstruos, muy al estilo del terror japonés que tan bien funciona en estos casos. Todo esto en PS5, en PS5 Pro hemos tenido noticia de algunos problemas de rendimiento en general.

Sonido clásico en la saga

Aquí se nota especialmente la mano del mítico Akira Yamaoka, que esta vez comparte composiciones con otros dos músicos. La ambientación musical juega un papel primordial en el tono y es parte viva de la historia, al igual que los sonidos de los monstruos y las dependencias que visitaremos, que nos alertarán de la existencia de enemigos o, simplemente, buscan crear tensión. El juego nos llega con voces en japonés o inglés, y subtítulos al español. Nosotros hemos elegido el doblaje japonés para una mayor inmersión y es sencillamente excelente.

Jugabilidad clásica con un punto nuevo

Silent Hill f sigue el esquema clásico en cuanto a jugabilidad. Aunque los desarrolladores han querido ofrecer algunas novedades que comentaremos a continuación, nunca hemos tenido la sensación de que pertenezca a otro género diferente de la aventura de acción y terror. El sistema de combate ha sido modificado con algunos toques “souls”, como una barra de estamina o un indicador de “cordura”, pero sigue siendo un combate tosco, indicador de que la protagonista no tiene experiencia en el uso de armas, al estilo clásico de la saga. Las armas también se rompen, aunque hay muchas repartidas por el mapa y será difícil verte sin armas. De cualquier modo, el sistema de esquiva también funciona bastante bien. A pesar de ello, algunos cambios introducidos ya avanzada la partida (que no te contamos para con hacer spoiler) no nos han convencido del todo, ya que suponen un salto más hacia la acción y menos hacia el survival.

Los puzles están muy bien implementados, son originales y no extremadamente difíciles, aunque lo suficiente para tenerte un rato pensando. Nosotros hemos jugados en máxima dificultad los puzles y aun así no han sido difíciles de superar. En definitiva, un juego que busca algunos puntos de innovación sin tocar demasiado lo que ya funcionaba y que, salvo esos toques raros que mencionamos más arriba, nos ha gustado en general.

Un Silent Hill diferente

En conclusión, este Silent Hill f es una rara avis dentro de la franquicia, pero lo suficientemente sobresaliente como para salir airoso del hecho de llevar un nombre tan importante para el género del terror. Algunos lo verán como un juego diferente, como mencionábamos al principio, al estilo de Silent Hill 4: The room. Otros lo verán como un soplo de aire fresco. Nosotros, desde luego, estamos encantados con que la saga siga tan viva, y esperamos con ansias los nuevos títulos anunciados dentro de la misma. Hinako pasa a ser otro personaje icónico de la franquicia por derecho propio. Si eres fan, dale una oportunidad, si no, dásela también. Siempre es maravilloso explorar la psique humana a través de historias como la que nos propone.