Norselia

Hacemos un repaso al estado sociopolítico del reino de Norselia.

En Triangle Strategy descubriremos Norselia, un territorio dividido entre tres reinos: Glaucoburgo, Fraguahelada y Dunálgida. En un principio, estos territorios estaban en paz, pero un día comenzó el conflicto conocido como la Gran Guerra Ferrosalina. La disputa viene de que cada región tiene dominio de ciertos recursos que son indispensables para las demás.

¿Cómo surgió la Gran Guerra Ferrosalina?

Glaucoburgo posee muchas tierras fértiles y rutas de comercio, Fraguahelada tiene hierro y una gran artesanía y Dunálgida posee el único lugar con sal de todo Norselia, un material absolutamente necesario para la supervivencia de todos los reinos.

Una guerra dividida en tres periodos

Antes de que estallara esta guerra, el Archiducado de Fraguahelada contactó furtivamente con el Reino de Glaucoburgo para intentar acabar con el monopolio de Dunálgida sobre la sal. Estas conversaciones resultaron en una alianza secreta entre ambas naciones. por la cual Glaucoburgo permitiría a las tropas helátides moverse por su territorio y les brindaría apoyo logístico con una condición: ambos países administrarían la Fontana de la Sal conjuntamente ubicada en el reino de Dunálgida.

El día en que comenzó el conflicto, las tropas del Archiducado avanzaron en secreto por el Reino y declararon la guerra a la Sacra Sede conforme atacaron su capital.

Ferrosalina
La Gran Guerra Ferrosalina

Dunálgida apenas alcanzó a cerrar sus puertas y la Adarga de la Diosa consiguió protegerlos del asalto. No obstante, las fuerzas militares de la Sacra Sede no estaban preparadas para el ataque y tuvieron que defenderse ante las armas de hierro del ejército invasor.

Para intentar cambiar las tornas, el Oráculo pidió apoyo a un clan que tenía un territorio independiente al norte de Glaucoburgo: la casa Wolffort. Symon, líder de los Wolffort, aceptó la petición del Oráculo y se dirigió hasta allí con una tropa reducida pero formada por guerreros de alta categoría.

Los ataques implacables de la casa Wolffort pudieron romper el asedio de las tropas helátides y las obligaron a retirarse de la frontera de Dunálgida. Esto habría echado a perder la estrategia de Fraguahelada. La proeza militar de Symon de Wolffort efectivamente cambió el curso de la historia. Lo que parecía solo un clan pequeño se consagró como una facción clave que determinaría el rumbo del conflicto y de toda Norselia.

Esta guerra duró 30 años y en todos esos años las naciones sufrieron incontables pérdidas civiles y militares, tanto que es imposible determinar el alcance exacto de los daños. Por este motivo se llegó a un acuerdo de paz entre los Tres Reinos.

Glaucoburgo y los Wolffort

En el Reino de Glaucoburgo, hay numerosas familias aristócratas que responden solo ante la Casa Real, así como un sistema político complejo que mezclan los derechos con las costumbres. El gobierno glauco presenta múltiples secciones, cada una gestionada por miembros de los realistas, un grupo de nobles entrenados para servir a la Casa Real.

De hecho, los propios ciudadanos de Glaucoburgo se mofan de ellos, afirmando que parlan sin llegar a soluciones reales. Cuando la Gran Guerra Ferrosalina tocó a su fin, el rey Regna optó por reformar el sistema entonces vigente.

Wolffort
La casa Wolffort

Lo primero que hizo fue dividir al clan Wolffort, entonces presidido por Symon. Las dividió en tres casas distintas y designó a cada una la responsabilidad de proteger regiones que servían como puntos estratégicos del Reino.

Así, nombró a Symon como patriarca de los dominios de Wolffort, mientras que su compañero de batalla Landroyd de Foulkes fue seleccionado como señor de la región fértil al sur. Finalmente, al consejero Godó de Teriol se le encargó gestionar el suministro de agua al norte del Reino.

De esta manera fue como se crearon las tres familias vasallas que sirven de apoyo al Reino. De hecho, el Rey había decidido implementar este sistema para contar con personas influyentes capaces de frenar los posibles abusos de poder de los realistas. Por otra parte, se piensa que el Rey buscó limitar el grandioso poder del clan Wolffort dividiéndolo en tres partes.

No obstante, Symon se negó a buscar más poder político, prefiriendo centrarse en curtir a los futuros guerreros de la nueva casa Wollfort. Además el sistema político del Reino antepone las costumbres y las especulaciones sobre todo los demás ha llevado a que los realistas continúen estado en la cabeza de la política del Reino.

Aquí comienza nuestra aventura

Comenzaremos 30 años después de la Gran Guerra Ferrosalina, después del acuerdo de paz y relaciones comerciales entre los reinos. Pero eso no quiere decir que haya amistad entre sus habitantes. Asumiremos el rol de Serinoa Wolffort, el heredero de la dinastía que defiende el reino de Glacoburgo. Además se va a casar con Frederica, una joven noble de Fraguahelada, que con dicha unión se pretende generar lazos entre ambos reinos.

Serenoa

Si bien hay deseos de mantener la paz, los intereses del linaje de los nobles pronto van a ser más importantes. Por lo que las traiciones y el derramamiento de sangre comenzará, y las decisiones que tomemos serán de vital importancia en los conflictos geopolíticos.

Si os ha gustado la historia y queréis ver continúa, recordad que podéis encontrar el juego en Steam y Nintendo Switch.

FantasyTienda: Figuras, merchandising, juegos
Antonio Barberi
Si algo he aprendido de los videojuegos, es que si encuentras obstáculos en el camino, es porque vas en la dirección correcta.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.