The Holy Roller es la nueva obra de Rick Remender junto a dos «desconocidos» guionistas llamados Andy Samberg y Joe Trohman. La parte artística corre a cargo de Roland Boschi y Moreno Dinisio. Esta propuesta presenta a un «héroe» muy poco convencional que luchará por eliminar el nazismo de su pequeño pueblo.
Norma editorial es la encargada de publicar esta obra de «superhéroes» autoconclusiva en un formato rústica con solapas compuesta por 280 páginas a todo color y con una gran cantidad de extras.
Sinopsis de The Holy Roller
Levi Cohen se ha pasado la vida huyendo de su ciudad natal. Se alistó en los Marines. Se unió a Greendpeace y viajó por medio mundo. Pero el destino tenía otros planes para él. Levi se ve obligado a volver para cuidar de su padre, a quien le han diagnosticado un cáncer.
Su regreso no es bien visto por el abusón del pueblo, quien siempre le hizo la vida imposible a Levi. Para colmo, el pueblo ha sido tomado por un grupo de neonazis, comandado por el padre de su enemigo de la infancia.
Incapaz de quedarse impasible ante las injusticias, decide tomar cartas en el asunto. Armado con la colección de bolos de su padre, y en honor al mismo, comienza a patrullar las calles bajo el nombre de Holy Roller. Estas aventuras le llevan a recuperar su amistad con su viejo amigo de la infancia, Jamal. Han pasado muchos años desde la última vez que se vieron, y ahora Jamal es un gran ingeniero que pondrá sus conocimientos técnicos a favor de Levi, diseñándole un traje apropiado para un superhéroe y un montón de Gadgets y armas acordes a Holy Roller. Es decir, relacionado con el mundo de los bolos.
Pero la misión de Levi no será fácil. Una gran empresa apoya este movimiento neonazi, facilitando recursos y organizando diferentes movimientos que lleven a su líder a dominar el pueblo.
Un alocado guion.
Antes de pasar a hablar de sus autores, quiero hacer un breve apunte. Sabía que Rick Remender (Death or Glory, Clase Letal)estaba a cargo de esta historia y, aunque un superhéroe con temática de bolos me parecía algo alocado y arriesgado, siempre hay que confiar en el bueno de Rick. No conocía a los otros artistas, así que me enfrente a The Holly Roller desde una perspectiva «seria» podría decirse.
Al principio la historia estaba bien. Te cuentan brevemente la infancia de Levi, su huida de la ciudad y su regreso para cuidar de su padre. Luego la historia comienza a volverse un poco loca: Levi y Jamal se pasan una noche en el sofá «fumando»; su padre aparece en calzoncillos el 70% de las escenas; y la trama comienza a volverse todavía más loca cuando aparece un Hitler holográfico dirigido mediante IA que asume su «pequeño error» y quiere recuperar el cariño del pueblo.
En este punto me pregunté qué tipo de cómic tenía delante de mí. No puedo decir que haya leído todas las obras de Remender, pero diría que no es para nada su estilo. Hasta que descubrí por casualidad que The Holy Roller es un cómic escrito a seis manos. Junto a Remender se encuentran Andy Samberg y Joe Trohman. Ninguno de los dos me suena. Hasta que ví quien es Andy Samberg. Este tio:
El maldito Jake Peralta de Brooklyn 99 guionizando The Holy Roller. De repente todo tuvo sentido. La historia tras de este cómic comienza a encajar cuando el lector entiende que es un cómic que no se toma en serio a sí mismo. Que está exagerado para buscar el humor, aunque la trama esconda un poderoso mensaje. Es una historia hecha para disfrutar con el absurdo de la misma. ¡Si hasta aparece un Pikachu-Hitler! Solo puedo decir: Maravilloso.
El otro coautor es Joe Trohman. Precursor de este proyecto, el guionista realmente no es guionista. Guitarrista de Fall Out Boy, el músico ha hecho algunos pinitos en el mundo de los cómics, como Rifters.
Con todo esto parece que The Holy Rollers es la creación de un grupo de amigos que han decidido juntarse para pasárselo bien y disfrutar haciendo un cómic.
Ahora sí, hablemos del guion
Para poder disfrutar de esta obra como es debido se tiene que afrontar como lo que es: una obra que parodia y exagera todo, que no se toma en serio a si misma y que busca entretener mientras se trata de fondo sobre un tema que realmente es importante: el odio y la envidia que provocan las redes sociales.
Sí. Es rara la mezcla. Pero al final el mensaje subyacente es ese. El villano de esta historia promueve el odio propio del nazismo para alcanzar sus objetivos, sin importar los medios que deba utilizar para alcanzarlos. Y una de las herramientas que utiliza es una app relacionada con su empresa de alimentos super-nutritivos.
Levi tendrá que enfrentarse a esta organización con la única ayuda de los ingeniosos gadgets que ha diseñado su amigo Jamal. Y no le será fácil, pues ha pasado demasiado tiempo fuera de la ciudad y no sabe en quién puede confiar.
The Holy Roller está lleno de clichés, de tramas recicladas de otras historias y de un humor absurdo. Puede pintar mal esto que digo, pero yo le daría una oportunidad si se enfoca la historia como es debido.
Dibujo y color.
Roland Boschi es el artista encargado de ilustrar este divertido cómic. Con un estilo rápido y poco detallado, Boschi realiza un buen trabajo en cuanto a la estructura narrativa y las escenas de acción.
El apartado que más sufre es el dibujo de los personajes, y más concretamente los rostros de los mismo. Llenos de líneas poco definidas en los primeros planos, y sin apenas detalles en planos más lejanos. El conjunto de esto lo convierte en un trabajo mediocre. Cumple su función pero sin mucho más. Incluso es difícil reconocer a ciertos personajes en algunas escenas. A esto ayuda las características propias de cada uno para poder entender los acontecimientos ilustrados.
Del color se encarga Moreno Dinisio, quien sí logra brillar a los lápices. Colores saturados y bien sombreados salvan un dibujo mejorable. Eso sí, entre uno y otro sangre y violencia hay a raudales.
Conclusión
The Holy Roller es un cómic divertido que se lee rápido y que entretiene gracias a lo exagerado de su argumento. Que el alter ego de Peralta esté al guion ayuda mucho a entender el tipo de cómic que tenemos ante nosotros.
Realmente esta reseña se puede resumir de la siguiente manera: sí te gusta Jake Peralta y el humor de Brooklyn 99, disfrutarás de The Holy Roller. Si no es tu caso, quizás puedes evitarlo.
Aunque me costó entrar en la historia, todo cambió cuando comprendí que es una historia que no se toma en serio a sí misma. En serio, un Pikachu-Hitler. Todavía no lo supero.
Creo que entre tanto factor cómico reside un mensaje que crítica el odio presente en las interacciones a través de las redes sociales: se insulta y agrede verbalmente a todo aquel que no coincida con tu forma de pensar. Creo que The Holy Roller va sobre esto. Pero recubierto con multitud de capas de humor.
Creo que aquellas personas que disfruten del humor de Andy Samberg disfrutarán de esta obra . Aquellas que lo detesten, no tienen porque acercarse a esta obra. Yo soy defensor de darle siempre una oportunidad a las cosas. Pero reconozco que para leer y disfrutar esta obra tiene que gustarte ese humor. Aún así, animo a todo el mundo a darle una oportunidad.
