Mandragora: Whispers of the Witch Tree es un juego indie con toques de rol, que podemos englobar dentro de la categoría metroidvania gracias a un exitoso proyecto kickstarter. A pesar de no tener una historia que perdure con el paso de los años, tiene lo suficiente para ponernos en marcha. Con cierto toque que recuerda a Vanillaware, tendremos que escoger clase antes de ponernos a cazar brujas y otros seres.
Comienza cazando a un puñado de brujas
La historia de Mandragora: Whispers of the Witch Tree es simple pero efectiva, y es que nuestro cometido será el de ejecutor inquisidor. Ya sea bajo la palabra de Dios o bajo las órdenes del mandato del clero, tendremos que hacer frente ante la gran amenaza que suponen las brujas. En una especie de fortificación o ciudadela, los peligros se encuentran a las afueras de nuestro refugio. Sin embargo, no tardaremos en darnos cuenta que existen más humanos fuera de la fortificación, sobreviviendo de mala manera.
Los enemigos de Mandragora: Whispers of the Witch Tree son variopintos, inspirados en el folklore medieval, pasando desde vampiros y lobos hasta las ya mencionadas brujas, un buen plantel de fantasía oscura. Para hacerles frente tenemos una jugabilidad bastante inspirada en el género souls, donde rodar tomará una gran importancia para esquivar los ataques enemigos. Sin embargo, los combates suelen ser tediosos y, por lo general, aburridos; los enemigos apenas tienen un par de patrones de ataque, y aunque puedan sorprendernos brevemente, por lo general son bastante predecibles.
A pesar de las clases, podemos mezclar
Al principio de nuestra aventura tenemos que escoger entre seis clases diferentes para personalizar a nuestro personaje. Conforme vayamos escalando niveles podremos abordar otras ramas, beneficiándonos de más habilidades diferentes. Dependiendo de nuestra manera de afrontar los combates, podremos hacerlo a distancia o centrándonos más en ataques de corto alcance. El empleo de estos puntos de habilidad puede ser restaurado, por supuesto con un coste que asumir. El poder cambiar por completo el árbol de nuestro personaje puede darle mucha chicha al enfoque frente a los combates, aunque restará rejugabilidad.
Un apartado bastante interesante es el bestiario, disponible cuando derrotamos a algún enemigo. El estudio de los mismos se plasma de una manera bastante chula, con un pequeño ensayo sobre cada uno de los enemigos. Aunque comentamos anteriormente que los enemigos suelen ser predecibles, no se puede decir lo mismo de los jefazos, que se nos plantearán como un reto algo más exigente, aunque por lo general, accesible.
Un entorno que apetece explorar
Una de las bellezas de Mandragora: Whispers of the Witch Tree es el manejo del entorno, ya que los escenarios están bastante bien conectados entre sí. Además de hacer interesante el backtracking, el plataformeo es bastante satisfactorio, sobre todo gracias al ansia de conocer y descubrir más de los paisajes que nos rodean. No estamos ante un mapeado rebuscado (la mayoría de veces los caminos son bastante evidentes), pero gracias a un buen mapa y a su sistema de viaje rápido sonará apetecible revisitar ciertas zonas.
Otro de los factores interesantes de este juego son las misiones secundarias, que sin ser abrumadoras resultan interesantes. Casi sin darte cuenta, Mandragora: Whispers of the Witch Tree te ofrece un buen rango de misiones opcionales que te encontrarás completando casi sin darte cuenta. Sin duda es algo de agradecer, ya que no se hacen pesadas de completar.
Su rejugabilidad está algo capada
Antes mencionamos la posibilidad de reiniciar nuestro árbol de habilidades para explorar otras formas de atacar a nuestros enemigos. Si bien al comienzo del juego tenemos que escoger clase, este apartado capa un poco la posibilidad de rejugar el título con otra clase diferente. No es que sea un impedimento mayor (sinceramente lo prefiero), pero le quita algo de gracia a su rejugabilidad desde cero.
Una vez terminemos nuestra aventura (con múltiples finales, dependiendo de nuestras elecciones), solo podremos volver a nuestra partida para completar las misiones secundarias que abandonamos. En un futuro se planea incluir un modo Nueva Partida +, además de incluir otros modos de dificultad, pero eso tendrá que esperar.
Un toque artístico innegablemente bello
Sin duda alguna, uno de los puntos fuertes de Mandragora: Whispers of the Witch Tree es su estilo artístico y visual. Gracias al perfeccionamiento de Unreal Engine 4 (en lugar de arriesgar con el más novedoso Unreal Engine 5), la ambientación que nos ofrece encandila y se ve bastante diferenciada por sectores. Los fondos animados nos ofrecen un encanto visual que nos hace parar a contemplar su belleza.
Otro de los aspectos a tener en cuenta es su abrumadora banda sonora, repleta de momentos álgidos interpretados por la FILMharmonic Orchestra de Praga. Su compositor no es ni más ni menos que Christos Antoniou, un grande en la escena del metal sinfónico, integrante de SepticFlesh. La ambientación siempre destaca, hasta en los momentos menos tensos de la aventura, creando así un entorno acogedor para el propio jugador.
El trabajo de doblaje también merece una mención, y es que se nota el empeño de los actores de doblaje, ofreciendo su pasión en los diálogos. Además de ello, el juego se encuentra traducido a la friolera de doce idiomas, entre los cuales se incluye el español.
Una mezcla con sabor agridulce
Lo que ocurre con Mandragora: Whispers of the Witch Tree es que, a pesar de todas sus bondades, es difícil digerirlo todo. Estéticamente es innegociablemente bueno, pero su historia se queda algo corta. Tiene varios finales, pero las decisiones no cambian tanto el transcurso de la historia, más bien el desenlace de la misma. Podemos elegir entre seis clases, pero en cualquier momento podemos redistribuir nuestras habilidades. Los jefazos pueden ser algo desafiantes, pero los enemigos normales tienen un patrón fácilmente reconocible, llegando a ser tediosamente aburridos.
Estos altibajos colocan al juego en una posición difícil, ya que estamos ante una obra interesante que, sin ser desmerecida, no llega a despuntar y convertirse en un título de culto. Podemos disfrutarlo, podemos sumergirnos en su jugabilidad, pero dudo que muchos jugadores lo recuerden dentro de unos años.
Conclusión
Si eres fan de los metroidvania, o más concretamente soulsvania, Mandragora: Whispers of the Witch Tree tiene una duración bastante decente, y es de agradecer debido a su precio superior a la media. Con un apartado artístico que no se puede desmerecer, algunas decisiones en jugabilidad y accesibilidad llegan a lastrar su desempeño. Recomendado sobre todo para los ya duchos en el género, más que para iniciarse en él.

✔️ PROS:
- Su apartado artístico, visual y sonoro es excelente.
- Una duración más que holgada.
- Sus misiones secundarias no se hacen pesadas.
❌ CONTRAS:
- Su precio es algo más elevado que la media.
- Combates algo deficientes y con movimientos predecibles.
- No es buen punto de partida para quienes se inicien en el género.
🎮 PLATAFORMAS: PlayStation 5, Nintendo Switch, Xbox Series y PC.