Fotógrafos de guerra es un cómic que homenajea el fotorreportaje, la labor de los fotógrafos de guerra que se jugaban la vida para dejar memoria y transmitir los terribles hechos que tuvieron lugar en esta guerra fratricida.
Planeta cómics es la editorial encargada de traer está curiosa obra en un formato cartoné compuesto por 160 páginas a color.
Sinopsis de Fotógrafos de Guerra
En esta obra seguiremos a Hans Namuth y Georg Reisner, dos jóvenes extranjeros de 21 y 24 años que se encuentran en la península como enviados para cubrir las Olimpiadas Populares que iban a tener lugar en la ciudad de Barcelona como respuesta pacifista y antifascista a los Juegos Olímpicos de Berlín. Pero antes de que comenzarán, el rumor de la sublevación del bando nacionalista contra la República corrió entre las calles. Tras el golpe de estado, Namuth y Reisner fotografiaron el conflicto que tuvo lugar en las calles de la ciudad condal, siendo de los primeros en retratar la crudeza de los enfrentamientos.
Tras la toma de Mallorca por parte del bando nacional, perdieron su estudio de fotografía y siguieron en la península hasta mediados de 1937. Durante esos primeros meses de guerra, apoyados por el gobierno republicano, ambos artistas se convirtieron oficialmente en fotógrafos de guerra, y recorrieron buena parte de España capturando con sus lentes una guerra que enfrentó a hermanos, vecinos y amigos.
Ambos se trasladaron a París, donde esta obra no da muchos detalles sobre los acontecimientos vividos durante esta época. Con la invasión nazi de gran parte de Francia, ambos artistas se reencuentran. Desde Marsella, Namuth intenta huir a Estados Unidos, ayudado por Varian Fry, director del Comité de Rescate de Emergencia. Mientas, Reisner ha sido arrestado.
Un guion que homenajea el fotorreportaje
Raynal Pellicer es el guionista de Fotógrafos de Guerra. Tal y como dice la ficha de la propia editorial, esta obra no es solo un cómic, sino un «reportaje ilustrado«. Y es que el autor ha pretendido desarrollar esta obra como si fuera un reportaje de guerra. Para ello se ha valido de una estructura visual casi sin viñetas, donde todo el peso cae en el dibujo que en gran parte de la obra pretende mostrarse como si fuese una misma fotografía. Esto, acompañado con los textos descriptivos sobre los acontecimientos ilustrados, generan la sensación en el lector de estar leyendo algo más que un cómic; de estar ante un reportaje.
Este reportaje trata sobre dos fotógrafos y sus vivencias durante la Guerra Civil española, acontecimiento histórico que están fotografiando para realizar un reportaje. Es como si fuera un metarreportaje.
Y la verdad es que esta idea funciona muy bien en Fotógrafos de guerra. La sensación de documental ilustrado que refleja esta obra esta muy conseguido. Pero no es solo por el tema de la historia en sí, sino también por la estructuración de las páginas, donde se mezcla el cómic y el documental jugando con la existencia o invisibilidad de las viñetas y sus márgenes. Y de esto tiene gran parte de culpa Titwane
Dibujando la guerra
Titwane es un ilustrador francés con experiencia en los reportajes ilustrados. Esto explica su gran hacer en Fotógrafos de Guerra.
Pierre-Antoine Thierry, la persona que se esconde tras el seudónimo de Titwane, ha colaborado con Pellicer en múltiples trabajos, varios de los cuales han sido premiados a diversos premios.
El ilustrador destacan por su estilo realista y sus colores pastel, como se puede apreciar en el portfolio de su web (la cual recomiendo visitar). En el caso de Fotógrafos de Guerra, el blanco y negro tiene un peso muy marcado, dejando que el color sea solo una nota en el sombreado, lo suficiente como para dar carácter y personalidad al dibujo.
Valiéndose de un estilo realista pero simple, el artista consigue llenar de detalle los fondos e ilustrar la vida cotidiana y el horror de la guerra.
Destaca sobre todo la composición de páginas y la mezcla de viñetas sin márgenes para dar una mayor sensación de realismo y documental, rompiendo con las barreras que pueden encorsetar la historia como algo ficticio.
Conclusión
Fotógrafos de Guerra es un excelente cómic siempre que no busques leer un cómic. Esto puede sonar raro, pero es lo más sincero que uno puede decir. Porque como se ha mencionado varias veces durante este artículo, lo que tenemos aquí es un reportaje ilustrado. Esto se siente desde las primeras páginas, donde la historia de Namuth y Reisner se mezcla con la Guerra Civil española y el cómic evoluciona a algo más: a un reportaje no solo sobre la citada guerra, sino también se convierte en un reportaje sobre la labor que realizan los protagonistas para conseguir fotografiarla. Sus vidas y su trabajo se convierte en el reportaje que hay tras Fotógrafos de guerra.
El guion está bien estructurado y es fácil de seguir. Pero es una pena que haya una etapa en la vida de los dos fotógrafos de la cual no haya información suficiente como para reflejarla en el cómic.
El estilo artístico es uno de los puntos fuertes de esta obra. Titwane es gran artista cuyo estilo encaja muy bien con la historia de Namuth y Reisner. El juego que realiza con una pequeña selección de colores en tono pastel le da fuerza al relato. También he de decir que no se corta a la hora de reflejar los horrores de la guerra, fiel a la labor igual que hicieron ambos fotógrafos. Esto puede no ser del agrado de todo el público, pero si necesario para no maquillar las atrocidades que se cometieron y que, siempre van unidas a la guerra.
Sabiendo esto último, si que me atrevo a recomendar Fotógrafos de Guerra a toda aquella persona interesada en este tipo de relatos, siempre y cuando sea conocedora de que este no es un cómic al uso.
