Llegamos al final de la trilogía original de Casanova. Después del torbellino de los dos primeros tomos, Casanova 3. Avaritia publicado por Norma Editorial en España llega para demostrar que la serie de Matt Fraction, Gabriel Bá y Fábio Moon tenía un objetivo claro al que se ha ido dirigiendo página tras página y que ahora, aunque sigue siendo todo un ejercicio mental seguir el hilo conductor de la trama, sabemos qué había detrás de toda esta locura de ciencia ficción.
Os adelantamos ya que este tercer capítulo mantiene intacta la personalidad de la serie: una estética muy marcada por los contrastes entre los dos dibujantes y una historia que juega constantemente con elementos de ciencia ficción, espionaje y la identidad.
Eso sí, esta vez se nota que estamos ante un volumen más medido, más consciente de que tiene que dar respuestas a los lectores y de que tiene que poner las cosas en su sitio. La historia se entiende mejor y los personajes ganan más profundidad pero, por otro lado, esa sensación de vértigo del segundo tomo aquí desaparece casi por completo. Algo lógico si queríamos que la serie nos diese respuestas en algún momento.
Un mundo que se amplía sin perder el rumbo
A nivel argumental, en Avaritia Casanova Quinn vaga por el espacio y el tiempo para purgar universos infectados por el mal definitivo… él mismo. Cuando descubre la identidad del demente y malvado Newman Xeno, su misión cambia y lo que había empezado como un asalto transdimensional de exterminio se convierte en un único asesinato repetido infinitamente, hasta liberar a todo el multiverso de Xeno. Pero, ¿qué pasa cuando un asesino se enamora de su objetivo?
La trama conecta muchas de las piezas que habían quedado sueltas en los dos primeros tomos y la historia cierra varias tramas que parecían no ir a ningún sitio. Además, los personajes siguen evolucionando y, aunque el factor sorpresa desaparece un poco, el tomo funciona muy bien.
Fraction, Bá y Moon: un equipo que ya domina su propio caos
Matt Fraction sigue demostrando que sabe encontrar su sitio dentro del desorden de historia que él mismo ha creado. El guion sigue jugando con los momentos crípticos en los que tenemos que hacer un verdadero esfuerzo por entender qué nos están contando, pero deja mucho más espacio para otras escenas más emocionales y mejor estructuradas que hemos agradecido mucho para disfrutar más de las explicaciones que llevábamos muchas páginas esperando.
Como ya comentamos en las reseñas de Luxuria y Gula, a nivel visual, Gabriel Bá y Fábio Moon siguen funcionando muy bien. Sus estilos se alternan a lo largo de toda la historia y tienen un equilibrio en el que Bá se encarga de los momentos de acción y Moon, de los pasajes más introspectivos. En este caso concreto, hemos tenido la sensación de que han trabajado juntos especialmente bien, ya que hay una sincronía entre ambos estilos que no llegamos a ver en los dos volúmenes anteriores y que aquí nos ha gustado mucho.
Quizá el mayor mérito de este volumen sea precisamente ese: lograr que un cómic tan caótico podamos tener sensación de orden y de un buen trabajo realizado sin perder su esencia.
Norma sigue mimando la edición
Una vez más, Norma Editorial ofrece una edición impecable que llega a las librerías en cartoné con más de 200 páginas impresas a todo color. Su formato es muy cómodo, ya que llega en un tamaño de 17 x 26 cm y el resultado es un volumen que apetece tener en las manos. Además, como en casi todas las obras de la editorial, al final de tomo tenemos un montón de material extra como bocetos y notas de los autores que, en este caso, hablan del reto que supuso dar forma a esta obra.
Conclusiones de la reseña de Casanova 3. Avaritia
Casanova Volumen 3 es un gran cómic. Continúa y cierra parte de la historia iniciada en los dos primeros tomos y mantiene intacta la personalidad de la saga. Sin embargo, también es cierto que el factor sorpresa —esa sensación de no saber bien lo que estás leyendo— se ha reducido un poco. Es normal: el mundo está construido, conocemos a los personajes y podemos llegar a entender por dónde van los tiros antes de que se nos muestre.
Si os gustaron los dos primeros tomos, Avaritia es imprescindible.
