La alternativa a Monster Hunter sale de caza en la nueva consola de Nintendo
Monster Hunter es el rey indiscutible de los juegos de caza en consolas y PC. Su fórmula va creciendo y refinándose entrega tras entrega y, aunque en ocasiones puede tropezar por el camino, lo cierto es que su comunidad y base de fans no paran de crecer. Aprovechando las ganas de los jugadores de seguir cazando monstruos, Omega Force lanzó en 2023 Wild Hearts para PC, Xbox Series X|S y PlayStation 5, un juego que, basándose en la fórmula de la saga de Capcom, ofrecía su propia visión del género.
Por desgracia, la encargada de la distribución del juego en Occidente fue Electronic Arts y, lejos de apoyar el juego durante su lanzamiento y los meses posteriores, lo abandonó a su suerte desde el primer momento. El resultado fue el que imagináis: ventas por debajo de lo esperado y un soporte poslanzamiento muy, muy justo, teniendo en cuenta que hablamos de un juego que quería rivalizar con Monster Hunter, un título que recibe actualizaciones constantes durante años para mejorar su equilibrio y añadir nuevos monstruos y armas.
Pese a todo, Wild Hearts tenía buenas ideas, una ejecución notable y algunas misiones que quedan para el recuerdo. Por eso, ver cómo el estudio ha podido lanzar Wild Hearts S en Switch 2 ha sido toda una declaración de intenciones. El juego es bueno, tiene potencial y quieren volver a probar suerte lanzando una versión mejorada en Switch 2. Vamos a ver todo lo que tiene que ofrecer.

Cazando monstruos en Wild Hearts S
Lo primero que queremos dejar claro es que la base del juego es la misma que vimos en 2023 en el resto de plataformas y que, por supuesto, llega con todos los parches y actualizaciones de contenido y corrección de errores que fueron llegando al juego durante los meses posteriores. Eso significa que tenemos, sin problemas, entre 50 y 60 horas de juego repletas de contenido, con algunos combates divertidísimos que aprovechan a la perfección su sistema de combate.
Aunque no vamos a entrar a hablar en profundidad de su sistema de combate, sí queremos destacar el hecho de que es lo suficientemente variado y diferente al de la propuesta de Capcom como para que resulte refrescante. Aquí, combatir con el arma es menos importante de lo que parece, aunque eso no quita que estemos golpeando a los monstruos constantemente.

Sin embargo, los elementos que realmente decantan la batalla a nuestro favor son los Karakuri, una serie de artilugios que podemos construir y que tienen todo tipo de usos. Por ejemplo, podemos levantar muelles para saltar durante el combate y ganar altura, colocar arpones para atrapar a los monstruos alados, instalar trampas para bloquear el movimiento de los enemigos en tierra y desplegar múltiples herramientas con efectos diferentes que nos han gustado mucho. La construcción es rápida e intuitiva: solo tendremos que encontrar el momento perfecto para usarlos y ganar ventaja en el combate.
También podemos construir Karakuri a lo largo y ancho de los escenarios para mejorar poco a poco nuestra velocidad de desplazamiento. Al empezar a jugar tendremos que recorrer los escenarios caminando de un lado a otro, pero con el tiempo desbloquearemos vehículos, tirolinas, cuerdas y todo tipo de accesorios que nos permitirán movernos de una punta a otra del mapa en cuestión de segundos.
Es este sistema de construcciones el que hace que el bucle jugable sea tremendamente adictivo y, además, el hecho de que los monstruos supongan un auténtico desafío desde el primer momento nos obliga a ser muy precisos durante todos los enfrentamientos.

Solucionando antiguos problemas
Cuando Wild Hearts llegó a las tiendas en 2023, lo hizo acompañado de una serie de problemas técnicos que pasaban factura a la experiencia de juego. El más evidente estaba relacionado con la cámara, que constantemente se colocaba en ángulos imposibles que no nos dejaban ver bien lo que ocurría en los combates. Por suerte, Omega Force solucionó este problema el año pasado y la versión de Switch 2 se ha beneficiado de ello.
A lo largo de estos años también han llegado varios parches de equilibrio que han permitido que todas las armas del juego sean realmente interesantes y que los talismanes que activan habilidades pasivas no rompan por completo las partidas en el endgame. De hecho, después de dedicar varias decenas de horas al juego, nos ha sorprendido lo bien equilibrados que están todos los elementos a día de hoy.
Lidiando con otros problemas
Por desgracia, Omega Force fue incapaz de conseguir que el juego funcionara a una tasa de frames estable en cualquiera de sus versiones, provocando auténticos desastres en los combates cuando había muchos efectos visuales o animaciones en pantalla. Las caídas de frames fueron constantes durante muchos meses y, aun ahora, siguen sin ser estables y, en el mejor de los casos, se intenta estabilizar a 30 fps. Teniendo en cuenta este problema, la llegada del juego a Switch 2 enarcó más de una ceja y, viendo el resultado final, el miedo estaba justificado.

El juego hace todo lo posible por mantenerse estable, lo que significa que ha reducido muchísimo la calidad de las texturas y la distancia de dibujado. También se han eliminado varios elementos de los escenarios y el modelado de personajes y monstruos ha perdido calidad respecto al resto de versiones y, aun así, el juego no consigue funcionar como debería. Sí, funciona infinitamente mejor que en su lanzamiento original de 2023, pero aun así sigue rascando en algunos combates pese al gran sacrificio gráfico que se ha hecho por el camino. En cuanto a datos técnicos, en modo portátil la resolución de pantalla es de 648p y 30 fps, mientras que en modo dock la resolución es de 864p y se mueve entre los 30 y 60 fps (muy puntualmente).
Este problema no es lo suficientemente grave como para lastrar la experiencia y, en nuestra opinión, Wild Hearts S es la mejor versión del juego al poder disfrutarlo en modo portátil, pero Omega Force aún tiene trabajo pendiente si quiere ofrecer una versión a la altura de la consola en la que se ha publicado.
Más jugadores pero sin crossplay
Otro de los cambios que encontramos en la versión de Switch 2 es que el modo multijugador cooperativo ha pasado de tres a cuatro jugadores, algo muy de agradecer y que, después de probarlo, creemos que le da un valor enorme a esta versión. El modo multijugador está disponible tanto en local como en línea, por lo que podemos recrear las sesiones de caza en la misma casa, como ocurría en la época de PSP y Nintendo 3DS.
La parte negativa es que se ha perdido la posibilidad de jugar con usuarios de otras plataformas, por lo que los jugadores de Switch 2 están limitados a jugar entre sí, mientras que los de Xbox Series, PlayStation y PC sí pueden jugar juntos sin problemas. Una decisión provocada por las diferencias técnicas y de contenido entre esta versión y el resto, pero que aun así puede provocar que el online de esta edición muera antes de tiempo si no consigue una base de jugadores estable.
Conclusiones del análisis de Wild Hearts S
Wild Hearts S está lejos de ser un port perfecto, pero aun así es un juego tremendamente divertido que ha encontrado en Switch 2 una plataforma ideal en la que seguir creciendo. El hecho de que haya llegado a las tiendas con todos los parches y actualizaciones del resto de versiones y con un modo multijugador para cuatro jugadores es un aliciente perfecto para optar por esta versión si tenemos una Switch 2 en casa.
Sí, es probable que dentro de unos años no recordemos esta versión del juego pero, por ahora, es un añadido interesante al catálogo de la consola que es perfecto para calmar las ansias de caza durante unas cuantas semanas. Si tienes dudas, anímate a probarlo.

✔️ PROS: Todo el contenido del juego original más las actualizaciones de contenido posteriores.
❌ CONTRAS: Problemas gráficos y falta de crossplay con el resto de plataformas.
🎮 PLATAFORMAS: Switch 2
























