Un juego de terror que no puedes perderte.
Cuando hablamos de juegos de terror, casi todos los jugadores estamos de acuerdo en que algunos entran por los ojos y otros que lo hacen por sensaciones. Pues bien, antes de empezar con este texto, queremos adelantaros que A.I.L.A pertenece claramente al segundo grupo y que, si estáis buscando un juego con el que meteros de lleno en su mundo, vais a disfrutar muchísimo. Os lo contamos todo a continuación.
Un argumento que suma sin robar protagonismo
A nivel narrativo, A.I.L.A narra una historia cuyo peso recae en una inteligencia artificial que está controlando la sociedad en la que vive el protagonista, lo que lleva a tratar temas como el control de la humanidad, la dependencia tecnológica o la pérdida de identidad individual.
Sin embargo, no podemos olvidar que estamos ante un juego de terror y, por lo tanto, la información llega poco a poco, a través de detalles, conversaciones y documentos que iremos encontrando, lo que nos permitirá ir encajando las piezas de la historia.
Es en este punto dónde vemos la primera ventaja de A.I.L.A. frente a otros juegos de terror de presupuesto ajustado: la historia es interesante y realmente nos anima a reflexionar sobre el rumbo que está tomando nuestra sociedad.

Un sistema de combate más sólido de lo esperado
Uno de los aspectos que más nos ha sorprendido de A.I.L.A es su sistema de combate. A primera vista puede parecer sencillo, incluso algo básico, pero conforme avanzamos y empezamos a entender sus reglas, queda claro que hay más capas de las que aparenta en un primer momento.
El combate apuesta por un enfoque directo y muy físico, pero en el que nos obliga a tener cierta planificación. No podemos machacar botones sin pensar, sino que es importante leer bien al enemigo, medir distancias y saber cuándo atacar y cuándo es mejor retroceder. Los errores se pagan caros, especialmente en los primeros compases del juego, y eso ayuda a generar una tensión constante que encaja perfectamente con la ambientación del juego.

Nos ha gustado mucho ver que las armas parecen tener peso, algo que se agradece mucho, ya que cada impacto transmite sensación de fuerza, y el juego sabe recompensar los golpes bien medidos.
Otro punto interesante es cómo el entorno influye en los combates. Los espacios no están pensados como simples salas cerradas, sino que pueden volverse en nuestra contra si no tenemos cuidado o no tenemos claro dónde están los obstáculos y esquinas cerradas en las que podemos encontrarnos de cara con un enemigo. Además, el ritmo del combate está muy bien medido, ya que el equipo de desarrollo ha sabido alternar momentos de tensión con otros más calmados, evitando que nos saturemos y que nos habituemos rápidamente a los combates.
Una ambientación de lujo
Si hay algo que realmente define a A.I.L.A es su ambientación. El juego genera una sensación constante de incomodidad incluso cuando no está ocurriendo nada. Es de esos juegos en los que siempre da la impresión de que algo puede suceder en cualquier momento, y no necesita recurrir al susto fácil. Por lo demás, el rendimiento es muy estable, el juego se mueve con fluidez y prácticamente no hay tiempos de carga.
El apartado sonoro merece una mención especial, sobre todo en lo que tiene que ver con la música ambiental, los efectos de sonido y los silencios, ya que están muy bien medidos y ayudan muchísimo a mejorar la inmersión.

Conclusiones del análisis de A.I.L.A
A.I.L.A es un juego pensado para todo el mundo, pero si te atraen los juegos con atmósfera, tensión y un combate algo más pausado de lo habitual, nos ha parecido una experiencia muy disfrutable.
Un título que demuestra que, con una buena base, se puede construir algo muy interesante sin necesidad de un gran presupuesto.

✔️ PROS: Ambientación y combates muy bien trabajados.
❌ CONTRAS: Algunos problemas técnicos menores.
🎮 PLATAFORMAS: Xbox Series X|S, PlayStation 5 y PC
























