Los Defensores de Gondor se unen a la batalla por la Tierra Media
Tras analizar en detalle el mazo de inicio de los Elfos de Lórien como parte de las diversas ampliaciones disponibles para El Señor de los Anillos: El juego de cartas – Edición revisada, ahora nos toca hablar del segundo de los mazos de inicio temáticos disponibles: los Defensores de Gondor.
Si en el artículo de los Elfos de Lórien hablábamos de mecánicas centradas en bajar y retirar Aliados como forma de ir debilitando a las fuerzas enemigas, en el caso de los soldados de Gondor nos encontramos ante mecánicas muy distintas pero igualmente divertidas.
Vamos a verlo en profundidad.
Al igual que el resto de mazos predefinidos, el mazo de inicio de los Defensores de Gondor incluye 82 cartas en total, de las cuales 55 dan forma a ese mazo predefinido. Este mazo se centra en aprovechar dos mecánicas concretas para sacar partido de situaciones complicadas.
La mecánica principal está directamente relacionada con el nivel de Amenaza del jugador y es que los efectos más poderosos de los Aliados y Héroes de este mazo solo se activan si tenemos un nivel de Amenaza que supere los 40 puntos. Recordemos que llegar a 50 puntos supone la derrota instantánea de la misión, por lo que el mazo juega con el concepto de riesgo-recompensa para crear partidas en las que siempre estaremos valorando la posibilidad de arriesgarnos un poco más quedándonos al filo de la navaja a cambio de asestar golpes más duros al enemigo. Así, algunos Aliados ganan puntos de daño o defensa cuando superamos los 40 puntos y algunas cartas Vinculadas solo activan su efecto al superar los 40 puntos.
Este concepto encaja a la perfección con la temática del pueblo de Gondor, ya que han sido los principales protectores de la Tierra Media frente a las tropas de Mordor durante siglos, y muchos soldados han pasado gran parte de su vida en una amenaza constante que les ha enseñado a sacar fuerzas en los momentos más complicados.
El mazo está construido en base a este concepto de forma que existen varias cartas que nos permiten aumentar o reducir nuestro nivel de Amenaza constantemente para regularlo y mantener un nivel de riesgo aceptable. Por ejemplo, existe una carta que sitúa el nivel de Amenaza en 40 puntos al instante y otras cartas nos permiten reducirla en dos, tres o cuatro puntos con facilidad. De esta forma, a nada que tengamos una mano decente, podremos evitar situaciones críticas que puedan suponer el final de la partida.
Junto a esta mecánica, el mazo se sustenta también en su amplio abanico de cartas Vinculadas con el rasgo ‘Arma’ o ‘Armadura’ que nos permite mejorar considerablemente las estadísticas de ataque y defensa de nuestros Héroes. De esta forma, después de cuatro o cinco turnos, es relativamente sencillo encontrar a jugadores que puedan tener mejorar equipadas en todos sus Héroes, creando una línea de defensa durísima que, aunque no puede apoyar demasiado en los Viajes y en el progreso general de la Misión, si puede soportar sin problema el daño de enemigos poderosos y puede arrasar fácilmente con las hordas de enemigo que nos irán saliendo al paso.
En lo que respecta a los Héroes, todos ellos cuentan con habilidades enfocadas a sacar partido al hecho de ser generales del ejército de Gondor. Por ejemplo, la habilidad pasiva de Boromir suma un punto de ataque a todos los Aliados con el rasgo ‘Gondor’ mientras éste Héroe tenga una esfera de recurso sobre su carta. Esta habilidad permite crear un ejército poderosísimo que suma su alta defensa natural con los aumentos de ataque que aportan Boromir y otras cartas específicas del mazo.
El Príncipe Imrahil, por ejemplo, se activa de nuevo siempre que un Aliado de cualquier jugador sea descartado, sin importar el motivo. Esto lo convierte en una figura muy interesante si la usamos junto a otro jugador que controle a los Elfos de Lórien, ya que nos permite jugar dos veces al Príncipe Imrahil cada turno que el jugador que controle a los elfos retire un Aliado.
Por último, Mablung nos permite tener un flujo de recursos constante en la reserva, ya que recibe un recurso extra por turno siempre que se enfrente a una unidad enemiga. Es la opción perfecta para ir generando esos recursos tan necesarios para bajar a mesa los Aliados más caros – y poderosos – del mazo.
Sin parecernos tan original como el mazo de los Elfos de Lórien, lo cierto es que las mecánicas que aportan las cartas de los Defensores de Gondor cambian por completo las reglas y la estructura normal de muchas partidas. Jugar con el concepto de mantener un nivel alto de Amenaza y crear una línea de defensa impenetrable mientras nuestros compañeros contribuyen a avanzar en la Misión nos ha gustado mucho. Además, comprobar cómo, poco a poco, nuestros Héroes se van haciendo poderosos gracias a las ‘Armas’ y ‘Armaduras’ resulta muy satisfactorio, especialmente en partidas que se alargan más de la cuenta.
Sin duda es un añadido interesante para todos aquellos jugadores que busquen ampliar la variedad de mecánicas disponibles en la caja básica con nuevas opciones originales y variadas.
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