Categories: Cómic/MangaReseñas

El Ocultista vol.2: A las puertas de la muerte

Bienvenidos de nuevo a los cielos del proyecto “Black Skye”, el nuevo universo compartido superheróico de la editorial Dark Horse que nos ofrece en exclusiva Aleta Ediciones. Tras mostrarnos las segundas aventuras del “Capitán Midnight” y de “X”, es el turno de volver con Rob Bailey, alias “el Ocultista”, el protector del reino de los vivos y de los muertos al ser el recipiente del mayor libro de conjuros de todos los tiempos, “La Espada”. En el volumen anterior conocimos a esta especie de Peter Parker místico, un adorable perdedor muy superado por lo que le rodea y al que no le queda más remedio que afrontar su destino. El guión era fruto de la colaboración de Mike Richardson y Tim Selley (guionista de la indispensable “Revival”) que ahora se une a su compañero de lápices en “Revival”, Mike Norton, para ofrecernos este nuevo tomo de rústica compuesto por la nueva miniserie de cinco grapas americanas.

Lo primero que nos encontramos son dos páginas de resumen con los hechos más relevantes acaecidos en el tomo anterior, la posesión de “la Espada”, el escape de los hechiceros cazadores, la perversión de los hechizos en pos de su propio beneficio y la lucha contra el tecnoshaman Adrien Beck y contra el mosnstruo conocido como “Quiebraespadas”, por no hablar de eludir los esfuerzos de la detective Anna Meléndez.

Ya comenzado este tomo descubrimos que Bailey ha aceptado su rol como el Ocultista y que sigue saliendo de patrulla con Meléndez mientras practica su rol heroico, voces y cosas de héroe novato. Norton pese a tener un estilo funny y marcadamente cartoon hasta casi parecer un clon de Mike Wieringo, logra aunar el oscurentismo y tensión del mundo de los muertos con un trazo muy dinámico que va genial para con la acción de tipo superhéroico que pretende llevar la nueva vida del Ocultista.

Un gran caso con tumularios y espíritus de bebes no natos, nos muestra que Bailey es quien maneja la situación y no “la Espada”, aunque se echan de menos esos momentos de posesión en la que un hechizo se habría paso siendo introducido por un dibujo como de códice antiguo, ahora el Ocultista es un tipo con túnica que lanza rayos verdes y conjura espíritus.

Está claro que Bailey siente algo por Meléndez y por ello no duda en usar su “forma astral” (sí, el Ocultista es un hechicero de capa roja que tiene forma astral y lo es mucho antes de que cierta película volviera a poner de moda a cierto cirujano que cambió de trucos de manos en cierta maravillosa compañía). Aquí Norton demuestra que puede hacer unas páginas de los más oníricas y plasma toda una riqueza visual surrealista y metafórica para expresar que el corazón de Meléndez está preso por un gran pesar.

No podemos olvidarnos del “tutor” de nuestro aprendiz de brujo, el señor Mr. Charles que cómo recordaréis no es otro que Beck poseyendo el cuerpo de cierto pobre policía y que además mantiene cautivo el espíritu de Elder, el dueño de la tienda de libros, hechicero y guardián de “la Espada”. Norton con él va a demostrar que si tiene que cargar de gore y vísceras las páginas como le gusta a Seeley, no tiene problemas en hacerlo. Parece que el tiempo se le acaba al tecnoshaman así que es hora de que “la Espada” renuncie a Bailey y para ello nada mejor que tentar a nuestro solitario y no correspondido hechicero con una despampanante hechicera rubia en traje de colegiala.

Ella es Luka, una joven universitaria que junto a Sam y a Malcom forman un aquelarre que hace incursiones a la reino de los muertos dentro de su colegio privado y católico. Es muy interesante el enfoque que le da a estos tres personajes Selley durante lo que queda de trama, pues realmente son unos yonkies vacíos que necesitan de ese chute que significa plantarse ante la puerta del reino de los muertos y que éste intente atraparte dividiendo tu esencia y purgando tus pecados. Bailey se va a ver arrastrado a todo un nuevo mundo de sensaciones sin limite que incluirán el sexo en forma astral, los tríos y romper la mayor y más importante de todas las reglas de el Ocultista no malgastar el poder y no desafiar a los muertos.

Norton de nuevo va a hacer un gran trabajo mostrando un grotesco y orgánico mundo de los muertos con ese curioso concepto de “la puerta” como algo físico que separa ambos reinos. En paralelo al viaje por la decadencia de Bailey, ahondamos más en la dura historial sentimental de Meléndez y porqué se siente marchitar como una rosa. Por cierto atentos a cierta viñeta en que están dando las noticias desde Arcadia sobre cierto justiciero llamado “X” (en algún lado se tenía que notar lo de universo compartido). Y Beck intentará dar con la forma de que su cuerpo como Mr. Charles no se colapse.

Es tremendamente divertido tener a Meléndez más implicada de lo que imaginaréis con la magia, teniendo que hacer frente a familiares y hacer búsquedas con la Ouija y de paso negociar con una especie de “santa compaña” de muertos, nada, nada contentos con el Ocultista.

Esta colección no sería nada sin una lucha contra un horrible monstruo gigante así que el Ocultista se las verá con el Segador, una poderosa encarnación de todos los muertos envidiosos de tomar el reino de los vivos. Unas páginas de infarto donde lo más divertido son los monólogos de Bailey intentando convencer a “La Espada” de que lo siga aceptando como el elegido y no morir en el intento.

Por último toda la trama de Beck  queda cerrada con un número en el que el villano conseguirá su deseo y descubrirá que es más una condena, John Quint es el nombre primitivo de nuestro tecnoshaman, un vendedor de elixires en el Lejano Oeste al que un cancer y la culpa por vender falsas esperanzas le llevó a abandonar el camino de dios hasta dar con los tecnoshamanes, un grupo de hechiceros que para sólo salir una viñeta demuestran lo mucho que le gusta el concepto steampunk a Norton. Una historia cruda, con un final sin duda redondo tanto para el villano como para los sentimientos de nuestros coprotagonistas.

Para más postre tendremos una misteriosa página en la que una figura en sombras habla con un tal Crepúsculo al que ya conocimos al principio del tomo, al parecer esa figura está vigilando a Ghost, X, Brain Boy, Capitán Midnight y a nuestro Ocultista, parece que el gran crossover de Black Skye empieza aquí, sólo espero que como los derechos de Ghost están con otra editorial, Aleta pueda llegar a un acuerdo y hacérnoslo llegar en su totalidad.

Completa el tomo una selección de bocetos de Mike Norton y unas variant covers de impresión.

Si te gustan los héroes atípicos más humanos que arquetípicos. Si te gusta el terror, la magia, la historias sin final feliz, éste es sin duda tu cómic. Deseando pronto tener más noticias de Bailey y el resto

Recent Posts

«La reina»: un hechizo que, pese a sus promesas, no funciona

Tras los acontecimientos de El rey, las expectativas puestas en esta última parte de la…

18 horas ago

Headquarters: World War II – Análisis

Headquarters: World War II es un juego de estrategia belicista por turnos desarrollado por Starni…

23 horas ago

Stellar Blade presenta el último vídeo making of de su desarrollo

Sony Interactive Entertainment ha lanzado el segundo y último episodio centrado en el desarrollo de…

2 días ago

Mullet MadJack: El frenético FPS inspirado en los animes clásicos

¡La espera terminará pronto para los aficionados a los FPS retro y los fans de los…

3 días ago

Metaphor: ReFantazio tiene fecha de lanzamiento

ATLUS ha presentado una transmisión en vivo especial de los desarrolladores de su inminente juego de…

4 días ago

Dwarves of Runenberg, DLC de The Last Spell

Las aclamadas batallas del RPG táctico de The Last Spell contra enjambres y hordas del mal que…

4 días ago

Esta web usa cookies.