En España, las criptomonedas están autorizadas como medio de pago legal desde 2015. Lentas pero seguras, las monedas virtuales se abren camino en nuestro día a día, y cada vez más pequeños negocios las tienen en cuenta para sus cobros y pagos. Después de las últimas controversias del sector, parece que la confianza en las criptomonedas cotiza al alza, y según una encuesta publicada recientemente por el Banco de España, entre el 7% y el 12% de los españoles han invertido en algún momento en estas monedas digitales, una cifra que va en aumento.
Sin embargo, aún existe mucho desconocimiento sobre este particular entre los no especialistas, algo que lastra que muchos autónomos y pequeñas empresas utilicen habitualmente las criptomonedas en su día a día. Es necesaria una adecuada regulación y una información precisa por parte de las autoridades, con el fin de minimizar los riesgos y maximizar las oportunidades que ofrecen las monedas digitales.
Sin embargo, cada vez es más sencillo adquirir y usar este dinero digital, que cada vez se utiliza más en las tiendas online. Utilizar criptomonedas ofrece ventajas por su rapidez, bajo coste y globalidad, aunque es necesario conocer las cotizaciones más recientes, como el Bitcoin precio, que hay que consultar antes de efectuar cualquier operación o movimiento con nuestras monedas digitales.
Los pagos o cobros en criptomonedas no suponen ninguna diferencia cara a Hacienda desde este 2024, que las considera de la misma forma que si estuviesen conformadas en euros, y hay que declararlos igualmente.
Las primeras declaraciones en monedas digitales se deben presentar desde el 1 de enero de 2024 y se estarán realizando respecto a las operaciones que se hayan llevado a cabo desde el 25 de abril de 2023. Deberán ser incluidas en la declaración del IRPF en el apartado “Ganancias y pérdidas patrimoniales derivadas de transmisiones de otros elementos patrimoniales” en la casilla 1626 la clave 0, que corresponde a “Monedas virtuales”.
Si un autónomo o empresa compra o vende criptomonedas a lo largo del año, Hacienda establece el criterio FIFO (primera criptomoneda en entrar, primera en salir, se prioriza la salida de los productos que llevan más tiempo “almacenados”) como referencia para calcular la diferencia de valor.
Existen multitud de páginas para comprar criptomonedas, pero cada vez se utilizan más los cajeros bitcoin. Son similares a cajeros automáticos normales, puesto que se trata de un puesto físico. En este caso, permite comprar monedas virtuales a cambio de efectivo o de cargos en una tarjeta de débito. Algunos de estos cajeros también permiten vender Bitcoins en el acto, a cambio de efectivo.
Los cajeros Bitcoin se conectan a un monedero virtual tras iniciar sesión, que sirve como depósito para las criptomonedas y desde el que se pueden realizar transacciones. España es el país de Europa con más cajeros Bitcoin, y ocupa uno de los primeros puestos del ranking mundial en este tipo de cajeros. Puedes encontrarlos sobre todo en grandes ciudades, principalmente en Barcelona, Madrid, Valencia, Alicante y Málaga.
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