Flower, un amor intenso, de Elizabeth Craft y Shea Olsen: lectura rápida

Hoy vengo a reseñaros una de las últimas novelas que Alfaguara a publicado en su sello juvenil. Os hablo de: “Flower, un amor intenso” escrita por dos autoras no muy conocidas, Elisabeth Craft y Shea Olsen.

A cualquiera que le gusten las historias de amor ligeras se fijaría en este libro, porque ya solo leyendo la sinopsis sabes que será perfecto para despejarte y relajarte leyendo la típica historia romántica que nos gusta.

“Flower, un amor intenso”, nos cuenta la historia de amor de Charlotte y Tate, cosa que ya es obvia si leemos la contraportada, pero que aun así nos atrae.

Charlotte lo único en lo que piensa es en llegar a la Universidad de Stanford. Ese es su objetivo. Toda su vida está planeada y se compone de instituto, trabajo, prácticas y estudiar. No se permite nada más.

Nada de chicos, nada de amigos, nada de televisión o música… No quiere para nada seguir el ejemplo de su familia. Tanto su madre como su hermana, pocos años mayor, que ella han tenido hijos dentro de una relación fallida, haciéndolas perder toda vida después del instituto. Los hombres han anulado a su hermana. Y su madre las dejó cuando eran pequeñas por amor, o al menos eso decía ella… Charlotte no quiere caer en la trampa de ningún chico, hasta que Tate entra en su vida.

Aunque no lo creáis, Tate no es un simple chico, es Tate Collins, el cantante de rock de moda que rompía las listas de ventas en toda América.  Y digo rompía porque ha desaparecido del panorama musical. Ya no da conciertos, ya no compone y ya no sale en la prensa desde que dio el comunicado oficial de que se retiraba de la música. Y es que algo misterioso le ha pasado.

El mantenía la vida típica de un rockero, con desfases por todas partes. Pero una tarde por casualidad ve a Charlotte trabajar en la floristería, y decide que ella será la que cambie su vida. Solo puede pensar en ella, y aunque ella lo rechaza desde un principio, no se da por vencido y reviven en él las ganas de intentar, de nuevo, volver a empezar con todo. Con su familia, con la música, y sobre todo con Charlotte.

Todo es un total flechazo desde el capítulo uno, pero por parte de él claro, porque ella intenta impedirlo hasta que no puede evitar la curiosidad de saber por qué hace todas esas cosas por ella. Y hasta aquí bien, porque después toda la relación es un constante tira y afloja en el que los papeles se intercambian de manera brusca, con una trama muy simple y con un machismo que aumenta en cada página. Soy muy fan de las historias de amor y me considero una romanticona, pero “Flower, un amor intenso”  no ha conseguido mi atención. No solo hay poca originalidad, sino que pecan de caer en todos los errores que hacen que una historia que tiene todos los ingredientes para que funcione, no lo haga.

Todo empieza genial, él se curra mucho que ella deje un poco de lado su objetivo y se permita disfrutar un poco de lo que puede ser su primer amor. Incluso te gustan los personajes, son divertidos, Y en el caso de Tate algo misterioso. Estos detalles hacen que sigas leyendo el libro. Después es donde llega, para mí, el error garrafal y es que Charlotte de repente pasa de cero a cien, con poca lógica. Por otro lado, él parece tener una guerra interna que solo hace que ella sufra. Todo poco justificado, supongo que para mantener el poco misterio que tiene la historia y que pases de un capitulo a otro. Otro punto que no me ha gustado es cómo se lleva al extremo, con respecto a Charlotte, el cliché de chica inocente y que luego se cargan en dos páginas, no sé, pasa sin más, sigue sin haber casi trama, la única excusa es que se desean. Todo es un aprobado raspado hasta que llegas al final, que bueno, no esta tan mal. Hace que te reconcilies con la historia y sus personajes un poco, solo un poco, si pasamos por alto todo lo anterior, claro.

En resumen, “Flower, un amor intenso” es un libro que se lee muy rápido, que es perfecto como novela ligera que llevar en el metro, que si te gustan los tiras y aflojas puede que te guste, pero que por lo menos para mí, no ofrece un amor o una historia tan intensa.
   
Elizabeth Craft escribió su primera noticia para el periódico de su instituto cuando tenía quince años. Ahora vive en Los Ángeles, donde trabaja como guionista y productora.

Shea Olsen siempre supo que quería ser escritora y tuvo la suerte de crecer en una casa llena de libros. Vive con su marido, dos gatos y un perro llamado Diesel. Cuando no está con el ordenador o leyendo, le encanta escalar, nadar, hacer yoga y comer deliciosas pastas vegetarianas.

Puedes leer aquí las primeras páginas.

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