El amor está en el agua: emocionante fábula acuática de Masaaki Yuasa

Este pasado día de San Valentín Selecta Visión estrenaba en cines españoles “El amor está en el agua”, la nueva obra de Masaaki Yuasa (“Lu Over The Wall”, “Devilman Crybaby”, “Night Is Short, Walk On Girl”). Un drama romántico al que no le faltan los toques de humor ni la fantasía propia del aclamado director.

“Ride your Wave” o “Kimi to, Nami ni Noretara” (en inglés y japonés respectivamente), es una tierna y colorida fábula que se alzó con el premio a la Mejor Película Animada en el Festival de Sitges 2019 y en el Festival Internacional de Shangai 2019.

Escrita por Reiko Yoshida, narra la historia de Hinako, una joven universitaria que se traslada a un pueblo costero, sin saber muy bien aún qué hacer con su futuro. Solo cuando se dedica a coger olas sobre su tabla de surf se siente completa, hasta que conoce a Minato, un bombero cuyo sueño es salvar a las personas y del que termina enamorándose. Pero la tragedia se abrirá paso para separar a la pareja, que quedará unida a través del agua y una canción. Bajo estas líneas podéis ver el tráiler en español:

Con una trama algo arquetípica, pero que se reserva las suficientes sorpresas como para mantenerte atento a la pantalla en todo momento, el film nos conduce a través de una tierna historia de amor que hará las delicias de los más ñoños. A su vez, el humor y el drama serán capaces de hacernos pasar de la carcajada al llanto contenido en apenas un par de escenas, en un carrusel de emociones más que satisfactorio.

Más allá del simple romance, “El amor está en el agua” nos habla sobre la madurez, el crecimiento personal, la pérdida y la resiliencia necesaria para levantarse y cabalgar nuestra propia ola.

Y lo hace a través de una construcción de personajes maravillosa. El contraste entre la inseguridad y la torpeza de Hinako y la determinación y el esfuerzo de Minato hacen que enseguida nos enamoremos de la pareja hasta el punto de desear que no les suceda nada malo (aunque sepamos que la felicidad jamás dura para siempre). Por su parte, la paulatina y sólida evolución personal de la protagonista es el principal atractivo de la película. Verla enfrentarse a sus obstáculos, caer y luego levantarse en una muestra de lo que podría ser cualquier vida emociona e invita a reflexionar sobre nuestro propio camino.

Otro de los pilares de “El amor está en el agua” es la fantasía, que está presente de forma secundaria en el film pero que crea escenas y ambientaciones que van de lo maravilloso a lo surrealista, del humor a la emoción.

Todo ello envuelto en un derroche de colorido y maestría técnica. Acompañando a una animación más que fluida, Yuasa no duda en experimentar con distintos estilos visuales y ángulos de cámara creando un conjunto cambiante pero a la vez inmersivo; gracias asimismo a una banda sonora que acompaña y guía las emociones del espectador y que tiene su importancia narrativa en “Brand New Story” de Generations from Exile Tribe, la canción de la pareja.

En definitiva, aunque un tanto predecible y excesivamente dulce por momentos, “El amor está en el agua” es un film auténtico que busca (y al menos para mí logra), algo más allá de la trillada historia de amor. Que se atreve a hablar de temas universales desde una perspectiva colorista pero no por ello menos efectiva. Y que, en conjunto, es capaz desde salvar una tarde aburrida en casa hasta de hacer que nos planteemos ciertas cosas sobre nosotros mismos.

Y eso ya es más de lo que muchas películas pueden atreverse a presumir.